SOLEMNIDAD DE MAXIMILIANO KOLBE

Maximiliano María Kolbe (en polaco, Maksymilian Maria Kolbe; Zduńska Wola, 8 de enero de 1894 - Auschwitz, 14 de agosto de 1941) fue un clérigo franciscano conventual polaco asesinado por los nazis en el campo de concentración Auschwitz durante la Segunda Guerra Mundial. Fue un gran propagador de la devoción al Inmaculado Corazón de María y un acérrimo combatiente contra el modernismo y los peligros que acechaban a la Iglesia en el siglo XX.

 Oremos:

¡Oh, San Maximiliano María! Fiel seguidor del Pobrecito de Asís, que encendido en el amor de Dios has pasado tu vida en la asidua práctica de las virtudes heroicas y en las santas obras del apostolado, vuelve tu mirada a nosotros, tus devotos, que confiamos en tu intercesión. Tu que, irradiado por la luz de la Virgen Inmaculada, atrajisteis innumerables almas hacia los ideales de santidad, llamándoles a toda forma de apostolado para el triunfo del bien y la propagación del Reino de Dios, necesitamos luz y  fuerza para obrar el bien atrayendo muchas almas al amor de Cristo. Tu que, en perfecta imitación del divino Salvador, has alcanzado tan alto grado de caridad para ofrecer, en sublime testimonio de amor, tu vida para salvar aquella de un hermano prisionero, intercede ante el Señor por la gracia que confiadamente te pedimos: Animados por el mismo ardor de caridad, que demostraste has podamos también nosotros con la fe y las obras, dar testimonio de Cristo ante nuestros hermanos, para alcanzar junto a ti, la posesión beatificante de Dios en la luz de la gloria eterna. Amén. Contemplación: En mi corazón llevo grabado tu valentía y entrega al Señor. El amor, a la Santísima Virgen María,esto nos permite saber como eras, el que ama a la Madre de Dios su vida siempre estara  llena de gracia hasta en la prueba mas dificil. Tu fidelidad fue hasta el fin, entrega y caridad, nos mostraste como ejemplo cual es el camino de la santidad; al que debemos imitar. El ángel del Señor en momentos de gravedad, me dijo que debía recurrir en la oración a tres santos: San Maximiliano Kolbe; San Ignacio de Loyola y San Ignacio de Antioquia, Se que  desde el cielo me ayudaran en la oración. Hoy te recuerdo con amor cristiano, respeto y agradecimiento. Amén Perla.