MARÍA MADRE DE DIOS Y MADRE DE LA IGLESIA

María Madre de Dios y Madre de la Iglesia

La bendición que tenemos como católicos en nuestra relación con la Virgen es que la tenemos y llamamos: Madre de Dios; Madre de la Iglesia y Madre nuestra

El Concilio de Éfeso (año 431) definió así:
“...habiendo unido consigo el Verbo, de ambas resulta un solo Cristo e Hijo... desde el seno materno se sometió al nacimiento carnal...De esta manera (los Santos Padres) no tuvieron inconveniente en llamar Madre de Dios a la Santa Virgen.

 Un poco más adelante, en el año 450, otro gran santo lo dirá de esta manera: “Se le reconoce y se le venera como verdadera Madre de Dios... más aún, es verdaderamente Madre de los miembros (de la Iglesia) porque colaboró con su amor a que nacieran en la Iglesia los creyentes...” San Agustín

El “Ave María” (oración rezada desde hace más de 500 años) en su segunda parte dice: ”Santa María, Madre de Dios...”

Contemplación:

 Amada Madre, que hijo de los que heredaste por Juan, y mandato del Señor

desde la Santa Cruz, puede decir que no fue escuchado en momentos de peligro.

De dolor de injusticia y persecución, siempre fuiste la Madre de amor y ternura.

La que nos enseña a rezar, la que nos pide no alejarnos de Dios, si caemos nos ayudas a levantarnos

y volver al Señor.

La que lleva al Señor nuestras necesidades e intercede ante su infinita Misericordia

Dice Juan Pablo ll

Oremos:

María Virgen de la escucha

y del Verbo hecho carne en tu Seno,

ayúdanos a estar disponibles

a la Palabra del Señor,

para que,, acogida y meditada,

crezca en nuestro corazón.

Ayúdanos a vivir,, como tú

la bienaventuranza de los creyentes,

y a dedicarnos con amor incansable

a la evangelización de los que buscan a tú Hijo

Amén

Oración a María del Papa Francisco

 

María, mujer de la escucha, haz que se abran nuestros oídos; que sepamos escuchar la Palabra de tu Hijo Jesús entre las miles de palabras de este mundo; haz que sepamos escuchar la realidad en la que vivimos, a cada persona que encontramos, especialmente a quien es pobre, -necesitado, tiene dificultades.-

María, mujer de la decisión, ilumina nuestra mente y nuestro corazón, para que sepamos obedecer a la Palabra de tu Hijo Jesús sin vacilaciones;-danos la valentía de la decisión, de no dejarnos arrastrar para que otros orienten nuestra vida.-

María, mujer de la acción, haz que nuestras manos y nuestros pies se mueven “deprisa” hacia los demás, para llevar la caridad y el amor de tu Hijo Jesús, para llevar, como tú, la luz del Evangelio al mundo. Amén.

Papa Francisco

ORACIÓN DEL SANTO PADRE BENEDICTO XVI A LA VIRGEN DE GUADALUPE VENERADA EN LOS JARDINES VATICANOS

11 DE MAYO DE 2005

Santa María, que bajo la advocación
de Nuestra Señora de Guadalupe
eres invocada como Madre
por los hombres y mujeres
del pueblo mexicano y de América Latina,
alentados por el amor que nos inspiras,
ponemos nuevamente
en tus manos maternales nuestras vidas.

Tú que estás presente
en estos jardines vaticanos,
reina en el corazón
de todas la madres del mundo
y en nuestros corazones.
Con gran esperanza,
a ti acudimos y en ti confiamos.

Dios te Salve, María,
llena eres de gracia, el Señor está contigo.
Bendita tú eres entre todas las mujeres
y bendito es el fruto
de tu vientre, Jesús.

Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Nuestra Señora de Guadalupe
Ruega por nosotros.